A mi madre
"Después de la tormenta llega la calma,
y una pequeña llama disipa la obscuridad.
Después de todo el dolor y sufrimiento,
que de tu rostro arrancó la sonrisa
y de tus espaldas la fuerza y seguridad,
después del temor y desconfianza
de haber perdido la senda
y no sentirte capaz de volver a amar.
Después del llanto vertido y la sangre derramada,
y los sueños destrozados,
después de derrumbar tu castillo,
forjado de sueños e ilusiones.
Debes tener fuerzas y ánimo
para seguir combatiendo,
ésto no te mató,
ésto no te derrotó,
al contrario,
te dio fuerzas y determinación.
Sigue adelante, avanzando,
y de los restos de tu castillo
haz una fortaleza,
adquiere nuevos bríos.
Se como aquella rosa,
que, aunque la flor se muera,
vuelve a florear,
candorosa y primorosa,
al llegar la primavera.
~Hans Speer
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